El cambio climático y sus efectos en la conduccion PRECAUCIONES

Los temporales son cada vez más comunes en nuestro país, la DANA y otros fenómenos recientes de mayor envergadura nos llevan a pensar que las precauciones que tengamos que tomar sean cada vez mayores.

Y aunque lo más recomendable ante estas circunstancias es no coger el coche… recogemos aquí algunos consejos prácticos.

EQUIPARSE ANTES DE SALIR

Antes de arrancar, comprueba que el coche esté bien preparado y equipado para estas circunstancias. Revisa los neumáticos, los limpiaparabrisas y el nivel de líquidos. Está de más decir que la visibilidad es fundamental, así que lleva siempre una bolsa de sal para desempañar los cristales. Una buena idea es también llevar una bolsa de herramientas, un botiquín, una manta y una linterna para posibles incidencias.

PRUDENCIA EN LA VELOCIDAD

Ya en la carretera, recuerda que los límites de velocidad se reducen cuando las condiciones meteorológicas son adversas. La prudencia es la mejor arma para circunstancias así.  

MAYOR DISTANCIA CON LOS DEMÁS

Aumenta la distancia de seguridad con el resto de vehículos. Recuerda que con lluvia intensa, la adherencia al asfalto se reduce a la mitad. Lo mismo si nos encontramos con hielo, niebla o nieve. Con la carretera mojada, la adherencia disminuye y se necesita mayor distancia para detener el vehículo. Incluso con las primeras gotas de una tormenta, estas se mezclan con el polvo y las hojas, volviendo la carretera muy deslizante y peligrosa. Si se produce el aquaplaning, nunca hay que frenar a de golpe, se debe sujetar el volante con firmeza y, cuando se recupere el agarre, hay que corregir la trayectoria. Si hay nieve en la carretera, se insiste en seguir las huellas de los otros vehículos y no acelerar innecesariamente. Y evita los adelantamientos cuando la climatología sea adversa. 

VISTA AL FRENTE Y CLARA

Tenemos que circular siempre con las luces encendidas, independientemente de que sea de día. Y eliminar el vaho de los cristales con la calefacción o bajando un poco las ventanillas.

PARADAS MÁS FRECUENTES

Conducir en situaciones adversas provoca más cansancio. Estamos alerta y eso nos produce una tensión que puede agotarnos o generarnos ansiedad o estrés. No tengamos prisa y paremos lo que sea necesario en lugares bien habilitados para ello. Eso sí, evitemos aquellos lugares que, por su especial orografía, puedan ser paso de riadas o desbordamientos.

PISA FIRME

Siempre hay que estar preparado para alguna situación adversa en la carretera, por ello es importante revisar los neumáticos antes de coger el coche, pero más si vamos a hacer un viaje en condiciones atmosféricas poco favorables. Hay que comprobar que no tengan cortes, no estén cuarteados y que su dibujo no sea menor de 1,6 milímetros. También hay que revisar la presión.  Si nos vemos obligados a colocar las cadenas, mejor hacerlo en un sitio seguro donde podamos hacerlo con tranquilidad. 

En cualquier caso, a pesar de todas estas recomendaciones, la más importante de todas es quedarse en casa y NO COGER EL COCHE EN SITUACIONES DE CLIMATOLOGÍA EXTREMA.

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