Desde 2013, en la Fundación A Víctimas de Tráfico ofrecemos asesoramiento legal, apoyo emocional y búsqueda de recursos para el accidentado de tráfico y sus familiares. Aproximadamente 4.000 personas se benefician cada año de manera gratuita de nuestros servicios.

Recientemente, PRIM Clínicas Ortopédicas y la Fundación A Víctimas de Tráfico han firmado un convenio de colaboración que tiene como objeto, ayudar a aquellas personas accidentadas de tráfico que necesiten servicios de ortopedia, rehabilitación y ayudas técnicas con el fin de facilitar tanto su recuperación como las actividades de la vida diaria. Por su parte, la Fundación A formará a los profesionales de PRIM Clínicas Ortopédicas en seguridad vial, aspectos legales tras el accidente y en habilidades psicosociales de atención a las víctimas y sus familias.

Desde PRIM Cínicas Ortopédicas se realizo una entrevista a Domingo M. García Fernández-Caro, nuestro director general, con el fin de descubrir más en detalle cuál es la labor principal de la Fundación A Víctimas de Tráfico:

¿Cómo y cuándo nace la Fundación?

La fundación nace en 2013, somos un grupo de personas sensibilizadas con el problema de la seguridad vial, sobre todo con los accidentes de tráfico y, en concreto, con las consecuencias que tiene para las víctimas. Nosotros entendemos como víctimas tanto a los propios accidentados como a la familia.

¿Cuál es su labor principal?

La Fundación A Víctimas de Tráfico se apoya en tres grandes patas de intervención. La primera es el apoyo emocional a las víctimas de siniestros viales. Somos la única fundación que ofrecemos este apoyo de manera presencial en hospitales públicos. Este apoyo emocional lo ofrece un grupo de psicólogos que acuden a las UCIs, a las urgencias, a la planta de traumatología, de quemados, de maxilofacial, e incluso de pediatría, de los hospitales. Nuestros psicólogos acuden a aquellas zonas donde puede encontrarse una víctima de tráfico. La segunda pata que tenemos es el asesoramiento legal: contamos un call center donde un abogado especializado forma y asesora a las víctimas sobre todo el tema burocrático, seguros, derechos, etc. Y una tercera pata que es la de recursos que incluye todos aquellos recursos necesarios para la reinserción de la víctima; por ejemplo, recursos de adaptabilidad y de accesibilidad. Con estas tres patas intentamos cubrir todas las necesidades que pueda tener una víctima de siniestro vial.

¿A qué se debe el nombre?

Fundación A, de Ayuda.

Para poder ser beneficiario de los servicios de la fundación ¿es necesario cumplir con algún requisito especial?

Nosotros no tenemos ningún criterio de selección previo. Una vez que detectamos que una víctima puede beneficiarse de alguno de los convenios que tenemos firmados les redirigimos a estas entidades. Además, contamos con convenios de colaboración con las consejerías de Sanidad de diferentes comunidades autónomas que nos permiten realizar nuestra acción social dentro de los centros hospitalarios.

¿Cuántas personas podéis atender al cabo de un año?

El último año, aproximadamente hemos atendido a 4.000 personas entre apoyo emocional, legar y ofreciendo recursos físicos. El apoyo psicológico es el que más damos debido a que estamos en los hospitales y es allí donde tenemos el primer contacto con las víctimas. Las víctimas de siniestros viales necesitan tanto el apoyo emocional que principalmente hacen nuestros psicólogos en los momentos posteriores al accidente como el asesoramiento legal porque hay un mundo burocrático tremendo muy complejo.

Si pudierais hacer un llamamiento, ¿qué pediríais?

Mayor visibilidad. Todavía hay mucha gente que no nos conoce. Pedimos que las comunidades autónomas se sensibilicen más con el tema y nos conozcan, porque además de buscar la prevención nosotros intervenimos con profesionales. Nosotros ofrecemos nuestros servicios de manera gratuita, no cobramos nada ni por el apoyo emocional ni por el asesoramiento. Nuestras intervenciones son de carácter gratuito.

¿De qué manera os ha afectado la pandemia?

Principalmente en dos grandes áreas. A favor, que al disminuir la movilidad ha disminuido la siniestralidad y por lo tanto hemos tenido menor acción, aunque se han seguido produciendo accidentes. Es curioso que la movilidad se ha reducido un 80%, sin embargo los siniestros viales solo en un 50%, por lo cual algo pasa ahí. En segundo lugar, nos ha afectado en el acceso al accidentado, ya que nuestra primera intervención se realiza en los hospitales públicos y estos se han cerrado al público, lo que ha hecho que nuestros psicólogos no hayan podido acceder y muchas personas accidentadas de tráfico no han podido beneficiarse de nuestra acción social al no conocernos.

Si después de conocer la labor de la Fundación A Víctimas de Tráfico quieres colaborar con nosotros puedes hacer una donación pinchando aquí.

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